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Publicado: Monday 07 de June de 2010, 16:42
Esta idea surgió de una discusión (en el buen sentido), que mantenía con mi padre, tras la última de los Rottweilers, que salió en la tele. Y me surgió la duda.Y si fuese contraproducente, la difusión de los ataques de diversas razas? Pensemos. Se difusiona en un mes que 3 pitbull han atacado a según qué personas. Inmediatamente, el escándalo de los medios, se posiciona en contra de una raza, con afán de exaltar el morbo social, mediante la exageración sistemática, y otras prácticas poco ortodoxas, destinadas a conseguir audiencia. Así mismo, la muestra de perros en películas, como malos, contribuye a la creación de una mala reputación en la raza. No son aislados los casos de Dobermann, o Rottweilers en películas, que aparecen como bestias monstruosas mordiendo todo lo que se mueve. La lógica común falla ante el espectáculo mediático, y no nos hace plantearnos que, una película jamás emplearía a un perro dispuesto a matar, o que no fuese adiestrable (de ahí, que cuando salen lobos, generalmente se emplean cruces, o razas similares, como el sarloos, en vez de auténticos lobos).El Dobermann, el Rottweiler, el Pit Bull, cobran fama de perros duros, y agresivos. Aspirantes a quiero y no puedo, tipejos duros, niñatos de un barrio cualquiera con ganas de impresionar a sus amigos, y aterrorizar a la población, en un alarde de masculinismo estúpido, compran una de estas razas para dárselas de tipos duros, ante el recluído nucleo urbano por el que se mueven (también se compran un Ibiza, y lo tunean, pero eso es otra historia). Son razas fieles a sus amos, valientes, y firmes, dispuestas a obedecer órdenes, y por tanto, no resulta complicado fomentar agresividad inducida en ellos.Pero estos mocosos no habrían llegado a esas razas, si su fama no se hubiese impuesto mediante la creación de mitos falaces, ridículas teorías, y reputación menos que deshonrosa, por medios de comunicación ignorantes, y películas en busca del espectáculo por encima de la verdad. |