¡Adicto Total!
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Publicado: Wednesday 09 de December de 2009, 17:17
Pues sinceramente, esto que te ocurre se me escama, de mis humildes y pequeños conocimientos.Tampoco conozco a nadie que le haya pasado con su perro.Me he estado documentando un poco, y aqui tienes un pequeño articulo, con fotos incluidas para ver si es lo mismo que tiene tu pequeño._________________La inflamación de los pies es una patología que acompaña muchas dermatitis de los perros, siendo mucho menos frecuente en gatos, en los que destaca la pododermatitis de células plasmáticas, proceso posiblemente inmunomediado que cursa con una hinchazón y ablandamiento de las almohadillas plantares de varios pies, principalmente de las metacarpianas y metatarsianas. Generalmente es una patología que remite sin tratamiento;cuando no es así, se recomiendan dosis inmunosupresoras de corticoides.En perros, ante una pododermatitis, un primer paso es comprobar el número de pies afectados. Si solo es uno lo más probable es que el origen sea traumático, con o sin la presencia de un cuerpo extraño, con frecuencia una espiga, incluyendo en esta etiología la forunculosis interdigital. Se observa la presencia de uno o varios nódulos eritematosos, generalmente a nivel dorsal, que pueden fistulizar, y la presencia de molestias con lamido o mordisqueado del pie.La forunculosis interdigital afecta con frecuencia a perros con pelos duros y cortos a este nivel, como los Bulldog Al caminar, los pelos son empujados hacia el interior del folículo, rompiéndose y liberando queratina, lo que provoca una inflamación intensa y una infección secundaria, generalmente por estafilococos.Recientemente (Duclos y col, 2008) se ha publicado que el proceso anterior se debe a quistes foliculares interdigitales causados por traumatismos de la superficie ventral interdigital, quistes que rompen y provocan una reacción inflamatoria a un cuerpo extraño, que se infecta secundariamente. Los autores describen su tratamiento mediante cirugía láser.En ambos casos, el tratamiento es similar al de otras infecciones profundas, a base de antibióticos sistémicos durante alrededor de 2 meses, que se puede complementar con antisépticos tópicos o mupirocina tópica; en el caso de la presencia de algún cuerpo extraño, éste tiene que ser eliminado previamente.Otras posibilidades son las neoplasias y, más raramente, las infecciones de las uñas, fúngicas o bacterianas, que se comentan más adelante.Cuando hay varias extremidades afectadas, lo primero que hay que diferenciar es si la inflamación se debe principalmente al lamido por parte del paciente o no.En los procesos alérgicos es frecuente encontrar varios pies afectados por el lamido o mordisqueado, generalmente los delanteros, lo que puede ocasionar la aparición en la zona afectada de alopecia, pelaje rojizo e inflamación de los espacios interdigitales.En estos casos es obligado realizar una citología de los espacios interdigitales afectados en busca de Malassezia o bacterias, ya que suelen ser gérmenes complicantes de la inflamación y hay que tratarlos.Además, salvo que la clínica indique lo contrario, en caso de duda hay que realizar un raspado profundo para descartar una demodecia.En el caso de que sean varios los pies afectados y las lesiones no se deriven del mordisqueado o lamido por parte del perro, las opciones más probables son la sarna demodécica y las dermatitis inmunomediadas.Por lo tanto, al igual que en el caso anterior, el primer paso es descartar o confirmar una demodecia mediante la realización de un raspado profundo o, si es negativo, con el estudio microscópico del material recogido mediante la obtención de pelos de la zona con pinzas. Si así tampoco se encuentran ácaros y hay sospecha de demodecia, se recomienda hacer una biopsia.Una vez descartada la posibilidad de una demodecia, se debe indagar si la causa de la dermatitis puede ser el contacto con alguna sustancia. Si se elimina esta posibilidad, lo más probable es que el origen sea inmunomediado.En este caso hay que buscar lesiones en otras zonas de la superficie corporal, en mucosas y en uniones mucocutáneas que puedan sugerir una dermatitis autoinmune y, en su caso, realizar una biopsia de lesiones recientes para su estudio anatomopatológico.Dentro de las causas autoinmunes, es posible la afectación de los dedos y pulpejos en la enfermedad debida a crioaglutininas, proceso en el que aparecen necrosis en las partes distales corporales (puntas de orejas y rabos, además de las comentadas en pies) cuando el animal se expone a temperaturas frías, por debajo de los 5°C.Una vez descartadas las posibilidades anteriores y si el aspecto es de una dermatitis autoinmune y solo hay afectación de los pies, sin lesiones en otras áreas corporales, el diagnósico probable es el de pododermatitis linfoplasmocitaria sensible a inmunosupresores, denominación recientemente propuesta.Pododermatitis linfoplasmocitaria sensible a inmunosupresoresEste proceso suele afectar a los 4 pies, aunque puede comenzar en uno o dos solamente, los cuales muestran intensa inflamación, con eritema, alopecia y dolor, pudiendo en ocasiones haber ampollas y fístulas con exudado serosanguinolento.Aunque la literatura cita que ningún caso responde a una dieta de eliminación, el autor ha observado algún caso relacionado con la dieta, por lo que considera importante someter a todos los pacientes a una restricción alimentaria de al menos dos meses de duración.Los animales responden al tratamiento con inmunosupresores, ajustando finalmente la dosis a la menor que controle el proceso; alternativamente al uso de corticoides se puede administrar ciclosporina a una dosis inicial de 5 mg/kg v.o. c24h, ajustando posteriormente la dosis.(Extraído de Rejas López, Juan. Dermatología práctica en el perro y gato. Castellón: Consulta de Difusión Veterinaria. 2007. 139-143. ISBN: 978-84-931636-5-5.) |