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Publicado: Monday 05 de October de 2009, 22:18
Hola a tod@s! Somos una pareja y hace un par de días adoptamos un perro mestizo de Rottweiler y labrador es precioso, de color negro. Queremos explicaros la historia de esta adopción para que nos deis vuestra opinión y además nos deis algún consejo porque estamos en una situación en la que no sabemos qué hacer.Empezaremos por el principio. Hace más o menos una semana, fuimos a la protectora de animales de nuestra zona, sólo por curiosidad y porque nos estábamos planteando tener un perro. Estuvimos mirando y vimos un par que nos gustaron, pero hubo uno que nos encantó desde el primer momento. Estaba en una jaula con 4 mestizos como él y él era el único que permanecía al fondo de la jaula, mirándonos fijamente y con una postura muy elegante. Entonces nos dimos cuenta de que ese tenía que ser nuestro perrito. Dos días después de hablarlo, fuimos decididos a adoptarlo y aquí empezaron una serie de sucesos que no nos hicieron mucha gracia.En el primer momento, fuimos a preguntar por el perro, por si podíamos tocarlo o si nos podían explicar algo sobre él. Nos atendió una chica y sólo nos dijo “Esperaros, llamaré a la chica que los conoce”. Así que esperamos unos 10 minutos y vino la tal mujer. Le dijimos que era un mestizo de Rottweiler en la jaula X y que era el que estaba más apartado. La mujer ya nos puso mala cara y nos comenzó a decir que ese no se dejaba tocar, que no era malo pero que se asustaba y era imposible cogerlo (eso nos convenció más para querer adoptarlo, pues no era un impedimento, sino un valor más para querer ayudarlo y tenerlo como compañero). Fuimos a ver el perro y la mujer nos quiso “mostrar” que no se dejaba tocar.Atención a lo que hizo ella:Entró a la jaula deprisa y asustada (se le notaba que no le hacia nada de gracia entrar ahí). Los demás perros se le echaron encima de forma cariñosa y él se alejaba a medida que ella avanzaba. Bueno, en realidad, ella avanzó apenas 1 metro de la puerta. Ni tuvo intenciones de acercarse a él, tocarlo o al menos incitarlo a que se acercara a ella. Entonces, volvió a salir de la misma manera, deprisa y asustada. Y la conclusión a la que llegó ella era que “es muy asustadizo”. Nuestra conclusión: si el perro huía de ella, por alguna razón seria.Luego de eso, nos intentó comer la cabeza: “Es que aquí está con su hermano, quizás si os lo llevais no coma o se muera de la pena (???????). Ahora acaba de venir una mujer con un cachorro de 7 meses precioso, bla bla bla”. Nosotros le dijimos que lo hablaríamos un momento entre nosotros y que ya les diríamos algo.Así pues, nos apartamos y hablamos de qué hacer. Queríamos al perro, fuera asustadizo o no. Y ellos como protectora MUNICIPAL no tenían por qué negaroslo, al contrario, deberían estar contentos de que no nos importe su actitud y de que quisiéramos adoptar un perro.Finalmente, se nos acercó otra chica (una tercera) y estuvimos hablando sobre el perro. Ella nos dijo “Hay que darle una oportunidad. Si no sale bien siempre lo podéis traer de vuelta”. Algo que nos pareció lo más correcto. Esta misma chica nos hizo la reserva para ir a buscarlo el fin de semana.Pasamos los días suuuper nerviosos y ansiosos para poder tenerlo ya en casa. Llegó el sábado y fuimos a la hora que nos dijeron (antes de que la protectora abra al público). Una cuarta chica nos atendió, le explicamos la reserva, la buscó, fue muy amable, pero UPS! Faltan algunos papeles del veterinario ….... Llamó a la responsable: “Vendrá en unos minutos”. Media hora después, ahí no aparecía nadie. 45 minutos y nada. Después de una hora, la chica nos dijo que mejor nos lo llevaramos y que otro día fueramos a por el papeleo. ¡Por fin!Pero aún no había terminado todo. Tocaba sacar al perro de la jaula y meterlo en nuestro coche. Yo me ofrecí para sacarlo, aunque hubieran 4 perros más. Primero entró una quinta chica a la jaula, se agachó y esperó para coger al perro. Luego entré yo e hice lo que César Millan hizo en uno de sus episodios (el de Banjo). Me puse de espaldas y agachado, lo que me ayudó para poder acariciar a nuestro perro e incluso hubiera podido ponerle el collar si no fuera porque la chica que estaba conmigo no tuvo intención de ayudarme. Entonces, la otra chica que esperaba fuera de la jaula con mi novia, llamó a un chico (recordemos que ya van 6 o 7 personas) que estaba limpiando las jaulas. Lo llamó para que ayudara a sacar al perro. El chaval (por no decir otra cosa) entró de muy mala manera a la jaula, como si fuera el rey de Roma o algo así. Eso hizo que los perros se alteraran y más cuando el chavalillo empezó a perseguir a nuestro pobre perrito. Esta persecución provocó una pequeña pelea entre nuestro perrito y otro. Después de eso, el chaval salió de la jaula de la misma manera que entró. Ahí pensé “Mejor que se pire, porque me la está liando”. Pero al cabo de 2 minutos volvió con una cuerda, se metió en la jaula y empezó a perseguirlo de nuevo. Intentando cazarlo cual toro en un rodeo. Lo consiguió, pero se hubiera merecido un buen mordisco por como lo trató, llevándolo hasta el coche, con la cuerda casi ahogándolo.Lo dejó en el suelo cerca del coche y se fue. Entre mi novia y yo intentamos tranquilizarlo y pudimos meterlo en el coche. Se tumbó y parece ser que se acomodó al coche puesto que todo el viaje de vuelta estuvo tranquilo a mis pies y a mi lado.Llegamos a casa y tuvimos que casi arrastrarlo hasta lo que es la zona donde tiene su casita y sus cosas. Tenemos otro perro, mestizo de Pastor Alemán y Mastín Español, pero están separados por una valla que les permite un poco de contacto, pero sin llegar a más. Dante, como lo hemos llamado, se pasó el día en un rincón observando. Nos alegró ver que frente a un gatito reaccionaba ladrando como cualquier otro perro. Sin embargo, no se nos acercaba, no nos olía, nada, ningún contacto. Al menos, comió y bebió. Por la tarde, quisimos sacarlo a pasear por la zona. Él se bloqueó y tuvimos que llevarlo a rastras hasta que empezó a mover un poco las patas. Yo quise darle un poco de juego con un palito (como con mi otro perro), pero cuando me vio levantar el palo para lanzarlo y que fuera a buscarlo, Dante se enroscó como si fuera a pegarle (el palo medía apenas 20 cm). Ahí nos dimos cuenta de una posible razón por la que es tan asustadizo. La segunda razón fue que, mi novia paseaba por delante mío, en un momento dado se paró para ir detrás nuestro, y cuando Dante pasó por delante suyo se apartó e intentó huir de ella. Claro está, ella no le dijo ni le hizo nada para que se asustara de tal manera. Lo llevamos a casa, también a rastras y lo dejamos en su casita.Al día siguiente, lo escuchamos ladrando de buena mañana. Le preparamos la comida y cuando fuimos a ponérsela, él no estaba. Había sacado la puerta de las bisagras y había saltado por el muro de la puerta principal. Enseguida salimos en su búsqueda y por suerte, como vivimos en un barrio, pudimos alcanzarlo en poco tiempo. Aunque nos hizo pasar un mal rato ya que ni siquiera con la bicicleta pude alcanzarlo, puesto que corría muchísimo. Pero, al cogerlo, volvió a arrastrar las patas traseras hasta llegar a casa. Le puse la comida y lo dejamos solo para dedicarnos a reforzar las salidas y que no volviera a huir.Hoy, por la tarde, le hemos dejado salir de su zona para moverse un poco por el terreno. Ha salido y a dado un par de vueltas. Se ha escondido, no se nos acercaba,... Lo bueno es que ha hecho sus necesidades en una zona de tierra que no es la suya. Hemos intentado acercarnos, pero él se ha vuelto a su casita y ya no ha salido en toda la tarde. Nosotros lo hemos intentado incitar con un poco de comida, lo hemos acariciado cuando estaba tranquilo en su casa, pero ni así hemos conseguido nada por su parte.Sentimos toda esta parrafada, pero queremos que Dante sea un perro feliz porque ya ha pasado suficiente en sus aproximadamente 2 años de vida. Queremos que confíe en nosotros, que sea capaz de relacionarse tanto con humanos como con otros perros, aunque con los demás animales no tiene ningún problema que sepamos.Agradeceríamos cualquier consejo que nos podáis dar.Un saludo,Carlos.PD: Os dejo fotos de Dante y Rocko.  |
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